sábado, 28 de agosto de 2010

Fingimos.


Todos los días,
a quien tengamos delante.
Entre caretas tejemos mentiras implacables
y nos obligamos a creer en ellas.

Vivimos dentro de historias
hacemos nuevas creaciones,
nos hundimos creyendo en las personas
y nos sumamos a sus invenciones.

Y por más que intentamos convecernos
de que todo lo que decimos es real
sabemos que las palabras se esfuman,
asi como nuestras vidas,
como el agua del mar va y viene entre olas
van nuestras comedias
entres las mentiras de los demás.

Somos cínicos y hemos aceptado esa verdad
en silencio, para nosotros mismos.
Y seguiremos actuando en la vida
como nos han enseñado a ser
desde que tenemos conocimiento.
Hasta el final de los tiempos,
hasta que polvo sean nuestros huesos
seguiremos fingiendo
y sumando cuentos a nuestro eterno invento.

No hay comentarios:

Publicar un comentario